jueves, 3 de abril de 2008

Fin del naufragio

La hoja me lleva
despierto de mi sueño profundo
de tinieblas bajo el sol
Es hora de un nuevo amanecer
de salir de este letargo
de mi estado de oscuridad.
El destino a veces duele
pega con fuerza en nuestro pecho
y nos reclama la valentía del intento
de la vocación
la esperanza aún late en estas manos
en lo que queda de mi mente,
en los restos de mi espíritu
pero más allá de los pormenores
que hasta esta orilla me han naufragado
he decidido que desde este día
y hasta que mis fuerzas se extingan
no voy a negociar mi actitud..
tal vez así en lugar de chocar mi cabeza
contra los límites de mi imaginación
logre llevar mi corazón hacia el infinito

1 comentarios:

María Gabriela Costigliolo dijo...

lo lei otra vez, me dejaste pensando,,... me hizo bien hablar con vos ayer.. UN beso